Según los estudios, hay un sorprendente número de personas que son diagnosticadas con fibromialgia y hepatitis C. En un estudio, la prevalencia de la fibromialgia entre las personas con hepatitis C es de alrededor del 15-19%. Esto es mucho más alto que la aparición de la fibromialgia en toda la población estadounidense, con solo el 2%. Tal estudio sugiere que la hepatitis C crónica puede estar entre los factores desencadenantes de la fibromialgia.
Qué es la Hepatitis C
La hepatitis C es un tipo de infección hepática desencadenada por el virus de la hepatitis C (VHC). Este es un virus transmitido por la sangre que se propaga en el cuerpo cuando la sangre de una persona infectada entra al torrente sanguíneo. Antes de la detección generalizada del suministro de sangre, la propagación del VHC se debió principalmente a las transfusiones de sangre. En estos días, el virus se propaga a través de la inyección de agujas en drogas.
Síntomas similares en fibromialgia y hepatitis crónica C
Tanto la fibromialgia como la hepatitis C crónica comparten características clínicas similares, que incluyen dolor muscular y fatiga. Aunque las dos condiciones no suelen acompañar a la otra, ciertos síntomas son únicos si una persona sufre de fibromialgia y hepatitis C. Un estudio encontró que aquellos diagnosticados con ambas condiciones muestran ciertos síntomas. Los síntomas particulares son inflamación en la articulación, vasculitis y bursa. Estos síntomas no están presentes en personas que tienen hepatitis C pero que no tienen fibromialgia.
Aumento de las proteínas inmunes tanto en la fibromialgia como en la hepatitis C
Las interleuquinas son un tipo de citocina que desencadena el dolor en una persona. Las citoquinas son esos tipos de proteínas que regulan la respuesta inmune del cuerpo. Se dice que varias interleucinas están elevadas significativamente en pacientes con fibromialgia. Casualmente, un grupo de investigadores en Harvard descubrió que estas mismas interleuquinas aumentaron después de la exposición al virus de la hepatitis C.
Dolor musculoesquelético en la fibromialgia y la hepatitis C
Muchos de los que tienen hepatitis C se quejan de artritis y dolor generalizado. A diferencia de otras enfermedades hepáticas, la frecuencia del dolor musculoesquelético en la hepatitis C es más común. El 48% de los pacientes con enfermedad hepática alcohólica sufren de dolor musculoesquelético, mientras que el 59% de los pacientes con hepatitis B sufren de dolor musculoesquelético. Sin embargo, el 91% de los pacientes con hepatitis C sufren de dolor musculoesquelético. Al ser el síntoma más prominente de la fibromialgia, no es sorprendente por qué el dolor musculoesquelético puede ser el vínculo entre la fibromialgia y la hepatitis C.
Además del dolor y la fatiga generalizados, otros síntomas comunes de la fibromialgia y la hepatitis C incluyen:
- Cambios de humor
- Depresión
- Niebla del cerebro
- Problemas digestivos
- Sudores nocturnos
- Dolor de hígado
- Síntomas parecidos a la gripe
- Problemas de la vista
Claramente, la fibromialgia y la hepatitis C crónica tienen varios síntomas comunes. Por lo tanto, los expertos sugieren que los pacientes con fibromialgia se sometan a la detección de la hepatitis C.