Gutiérrez propone reconocer la fibromialgia como una enfermedad crónica.

Quienes padecen la enfermedad no pueden realizar casi el 25% de las tareas diarias. 
En el mes de la conciencia de las enfermedades reumáticas, el diputado Livio Gutiérrez, dependiente del Ministerio de Salud, ha designado en nuestra provincia a la fibromialgia como una enfermedad crónica y brinda cobertura a los pacientes que padecen esta enfermedad, de acuerdo con los beneficios que otorga Ley N 4150/16.

El borrador comienza con el comentario de que, desde dos iniciativas legislativas previas sobre este tema (3837/13 y 3855/15) y que aún no se han examinado, se propone extender estos proyectos “, dijo. Es absolutamente necesario presentar el tratamiento y discutir este proyecto de ley porque no podemos evitar las necesidades reales de las personas que padecen esta enfermedad “, dice Gutiérrez.

La fibromialgia es una enfermedad llamada enfermedad silenciosa, algunos síntomas, dolor crónico en los músculos, articulaciones y tendones. Aquellos que también tienen trastornos del sueño, pensamientos desorganizados e incluso depresión. Síntomas no identificables, con la excepción de la reducción de la masa cerebral cuando no está suficientemente hidratada, de modo que los pacientes sufren trastornos del sueño, rigidez matutina y otras consecuencias de dolor constante . Los expertos en reumatología de la historia nacional reconocen que todavía hay muchos casos de fibromialgia no diagnosticada y que las posibilidades de un tratamiento exitoso reducen la falta de diagnóstico temprano.

 

Un informe sobre la enfermedad y sus consecuencias muestra que las personas que padecen esta enfermedad no pueden realizar las tareas diarias de casi el 25%, mientras que el 60% de las personas considera que su capacidad ha disminuido en un 60%.

Los legisladores estatales radicales “son un reconocimiento pobre de muchos profesionales de la salud y aún más de la sociedad y los medios en los que estos pacientes están vinculados, incluido el trabajo y la familia. A esto debe agregarse el hecho de que una intolerancia significativa al estrés físico y mental con trastornos cognitivos tiene un impacto significativo en la calidad de vida. ” 
La extensión de los principios básicos establecidos que, debido a las características, el tratamiento no es sólo un especialista, un equipo multidisciplinario que participen, reumatólogos entrenados, psiquiatras, psicólogos, médicos y otros especialistas . ayuda a definir el diagnóstico

“La importancia de la legislación en la compra de patologías en esta zona para contrarrestar la cobertura de los pacientes con esta enfermedad, tanto en los sectores públicos y privados. La salud es un derecho fundamental de todos los ciudadanos. Por lo tanto, es responsabilidad del Estado de garantizar el pleno ejercicio de prioridades para asegurar que los ciudadanos marginados y socialmente vulnerables “Ampliación” a la promoción, protección y recuperación de la salud. de sus habitantes, para asegurar el desarrollo del estado de bienestar físico, mental y social. “

“Hoy, el problema es cada vez más claro, las demandas de la población de todo el país para el reconocimiento y la presentación de una iniciativa parlamentaria para tratar esta enfermedad, lamentablemente, se están volviendo más comunes”, concluyó Gutiérrez. 
diagnóstico

También indica los elementos que deben ser diagnosticados por un reumatólogo y el equipo interdisciplinario con otros profesionales de la salud, como psiquiatras, psicólogos, fisioterapeutas, médicos y otras personas involucradas en la ejecución.

 

Una vez que se realiza el diagnóstico, el paciente tiene libre acceso a medicamentos inmunomoduladores específicos y / o está indicado por un profesional calificado dentro del Ministerio de Salud provincial, sin beneficiarse de la seguridad social; la amplia cobertura de tratamientos interdisciplinarios basados ​​en neurorrehabilitación sin puntos de parada o límites, según la certificación del asistente médico; Incluye tratamientos médicos y farmacológicos y otros tratamientos que se consideran necesarios en todos los casos para las personas con síndrome de fibromialgia, independientemente de su edad. 
Tienen derecho a la totalidad o parte de los beneficios definidos de acuerdo con la extensión determinada por las regulaciones.

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