SINDROME MISFASCIAL DEL DOLOR (MPS) Y FIBROMIALGIA

Muchos de los que ya sufren del dolor de la fibromialgia también sufren del síndrome de dolor miofascial. El síndrome de dolor miofascial es otra forma de dolor crónico que puede afectar todo el cuerpo, especialmente la cara y la mandíbula. El dolor miofascial puede aumentar los ya molestos síntomas de la fibromialgia y puede contribuir a la discapacidad y a una mala calidad de vida si no se diagnostica adecuadamente. Si cree que puede estar sufriendo una disfunción miofascial, consulte a su proveedor de atención médica para analizar sus opciones de tratamiento.

¿Qué es el Síndrome de Dolor Miofascial? 
El síndrome miofascial es un trastorno del dolor que afecta los músculos y la fascia de todo el cuerpo. La fascia es como una red que rodea los huesos, tejidos, órganos y vasos sanguíneos de todo el cuerpo. El síndrome de dolor miofascial puede atacar y causar la degeneración de ciertas áreas de la fascia, lo que produce dolor crónico y una variedad de otros síntomas.

El dolor generalmente se origina en áreas específicas del cuerpo, llamadas puntos gatillo miofasciales (PG), que se sienten como pequeños nódulos debajo de la piel. Estos puntos desencadenantes comúnmente se desarrollan en todo el cuerpo, generalmente donde la fascia entra en contacto con un músculo.

El síndrome de dolor miofascial es una enfermedad muy común, y la mayoría de las personas desarrollarán al menos un punto de activación en su cuerpo en algún momento de sus vidas. La mayoría de estas personas no desarrollarán síntomas graves y podrán continuar con sus rutinas normales. Sin embargo, aproximadamente el 14% de la población desarrollará una forma crónica del síndrome, lo que provocará dolor e incomodidad persistentes.

El trastorno de dolor miofascial es muy común en pacientes con fibromialgia. Alguna vez se pensó que el síndrome de dolor miofascial era en realidad un tipo de fibromialgia. Sin embargo, ahora se sabe que este no es el caso. Es posible tener fibromialgia y síndrome miofascial crónico, y por lo tanto, es importante ser diligente al analizar los síntomas. Si nota síntomas del síndrome miofascial, regístrelos e informe a su médico.

Signos y síntomas del síndrome de dolor miofascial
El signo más común de dolor miofascial es la presencia de puntos gatillo palpables en los músculos. Los puntos desencadenantes son áreas de extrema sensibilidad y sensibilidad, y generalmente se forman en bandas de músculo debajo de la piel. Son similares a los puntos sensibles causados ​​por la fibromialgia, solo se pueden sentir puntos gatillo debajo de la piel. Cuando se toca, los puntos gatillo producirán dolor y espasmos en los músculos. A menudo, el dolor se siente en un área distinta del punto desencadenante que en realidad se ve afectado esto se denomina dolor referido.

El dolor del síndrome miofascial suele ser un dolor sordo, pero también puede producir una sensación punzante, punzante o ardiente. El dolor a menudo se localiza en el área de la mandíbula, aunque cualquier parte del cuerpo puede verse afectada. Un tercio de los pacientes con dolor miofascial informan dolor localizado, mientras que dos tercios informan tener dolor en todo el cuerpo.

El dolor miofascial también puede producir una variedad de otros síntomas, muchos de los cuales pueden parecer no relacionados. Éstas incluyen:

  • entumecimiento en las extremidades
  • hacer estallar o hacer clic en las articulaciones
  • movimiento limitado de las articulaciones, especialmente la mandíbula
  • debilidad muscular (que se manifiesta al dejar caer cosas)
  • migraña o dolor de cabeza
  • sueño perturbado
  • problemas de equilibrio
  • tinnitus y dolor de oído
  • visión doble o visión borrosa
  • problemas con la memoria
  • náuseas, mareos y sudoración inexplicables

Factores agravantes Los
síntomas a menudo se ven agravados por factores específicos. El estrés y la ansiedad contribuyen a la tensión muscular y pueden irritar los puntos gatillo. Los cambios en el clima, que incluyen frialdad repentina, humedad alta o sequedad extrema también pueden agravar los síntomas. La actividad física también puede desencadenar síntomas.

Causas del síndrome de dolor miofascial
Existen numerosas causas propuestas de dolor miofascial:

  • Problemas musculares y esqueléticos: las  causas del síndrome de disfunción del dolor miofascial pueden ser numerosas y depender del individuo. En general, el dolor miofascial es causado por algún tipo de trauma en los músculos y el esqueleto en el cuerpo. El exceso de trabajo de los músculos puede causar daño a ciertas áreas, lo que resulta en el desarrollo de un punto de activación. La mala postura también puede desencadenar dolor miofascial en ciertas personas. Las anomalías esqueléticas, como tener pies, dedos de los pies o piernas de diferentes tamaños, también pueden contribuir al desarrollo de dolores miofasciales. La exposición frecuente al clima frío también puede aumentar el riesgo de desarrollar síndrome de dolor miofascial crónico.
  • Dolor por fibromialgia crónica: las  personas con fibromialgia pueden sufrir el síndrome de dolor miofascial como resultado de su dolor por fibromialgia. Compensar el dolor a menudo puede causar un movimiento reducido o una postura poco saludable, lo que lleva a la formación de puntos gatillo. El dolor severo causado por la fibromialgia también causa contracciones musculares alrededor de los puntos sensibles, lo que se conoce como protección. Finalmente, estas contracciones musculares provocan la formación de puntos gatillo además de los puntos sensibles de la fibromialgia.
  • Depresión asociada con la fibromialgia:  la depresión asociada con la fibromialgia también puede causar el desarrollo de dolor miofascial. Al menos el 30% de los pacientes con fibromialgia sufren de depresión, lo que causa niveles bajos de serotonina en el cerebro. La serotonina es un neurotransmisor responsable de regular el estado de ánimo y el dolor en el cuerpo. La depresión puede interferir con el proceso de regulación del dolor, causando MPS.

Efectos del MPS en la fibromialgia
Tener el síndrome de dolor miofascial y la fibromialgia a veces puede ser bastante difícil. Los síntomas de MPS y la fibromialgia son muy similares, lo que dificulta a los profesionales médicos diagnosticar correctamente a muchas personas. Sin un diagnóstico adecuado, es posible que un paciente no reciba el tratamiento adecuado y empeore los síntomas. Además, el dolor miofascial a menudo puede contribuir al dolor causado por la fibromialgia, haciendo la vida mucho más difícil de disfrutar.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *