La fibromialgia puede ser difícil de diagnosticar debido a que sus síntomas son crónicos y generalizados, dolor muscular o rigidez, fatiga, confusión mental, sensibilidad a la luz, dificultad para dormir, estos síntomas también pueden en algunos casos superponerse a otras enfermedades como la depresión y las afecciones. como la artritis reumatoide, el síndrome de fatiga crónica y el lupus.
Para mejorar los síntomas de la fibromialgia es importante para obtener una mayor conciencia acerca de dos aditivos alimentarios, en particular:
El glutamato, un aminoácido que mejora el sabor y se encuentra en muchos alimentos procesados, es un neurotransmisor que excita las células nerviosas, razón por la cual este y otros compuestos similares se llaman excitotoxinas. Varias investigaciones confirman que “en grandes cantidades, el glutamato es tóxico para las células nerviosas”, por lo tanto, es importante para los afectados por la fibromialgia verificar las etiquetas y evitar los productos que contienen glutamato monosódico.
El aspartato (que se encuentra en el edulcorante artificial aspartamo) es otra excitotoxina que debe evitarse.
Una dieta saludable puede proteger las células nerviosas de las excitotoxinas. Las frutas y verduras proporcionan vitamina C y el pescado, como el salmón, es una fuente excelente de vitamina D y ácidos grasos omega-3, que ayudan a proteger contra la toxicidad del glutamato. El magnesio (que se encuentra en granos enteros, vegetales de hojas verdes y nueces) también puede reducir la toxicidad del glutamato. Puede ser difícil obtener suficiente magnesio de los alimentos, por lo que sería aconsejable tomar un suplemento a base de magnesio.
El estrés parece ser un factor que contribuye a la fibromialgia, si aprende a manejar el estrés, es posible que pueda retrasar o incluso prevenir el desarrollo de síntomas.
La actividad física puede ayudar a reducir el dolor y la fatiga, por lo que es importante evitar actividades rigurosas y / o de alto impacto como correr, esquiar o jugar al tenis, lo que aumenta el riesgo de lesiones y dolor que pueden agravar la actividad física. La fibromialgia comienza suavemente con actividades livianas, como caminar lento, postural o pilates.
Alivia los dolores con masajes ; Los dolores localizados de la fibromialgia, como el dolor de hombro, se benefician de la terapia de masaje que ayuda a restaurar la función y el movimiento. Excelentes técnicas que alargan o manipulan el tejido conectivo, como la liberación miofascial. el shiatsu y el masaje deportivo de relajación ofrecen los mayores beneficios.